El concurso CambiARTE fue diseñado en 2015, en el marco del evento Finanzas del Clima, para acercar el cambio climático a la sociedad en general. Con la convicción del poder del arte para sensibilizarnos sobre nuestra realidad y tocarnos en lo que nos hace humanos, el Comité de Gestión Financiera del SISCLIMA, la Agencia Francesa de Desarrollo (AFD) y el Fondo Acción crearon CambiARTE, un concurso nacional para desarrollar propuestas artísticas que contribuyan a sensibilizar y formar públicos sobre el cambio climático. El propósito ha sido apoyar la creación de nuevas narrativas sobre el cambio climático que despierten emociones, generen cuestionamientos y, con ello, motiven cambios de mentalidad y comportamiento en quienes participan en las propuestas artísticas.
Las propuestas ejecutadas han incluido talleres artísticos con niños, niñas y adultos de sensibilización sobre el cambio climático, generando conexiones específicas con los ecosistemas, el agua, la energía y la comida; así como procesos de investigación y creación por parte de colectivos de artistas que han producido cómics, música, ilustraciones e instalaciones. Los procesos y resultados de la creación artística se han desarrollado en museos, bibliotecas públicas e institutos culturales con públicos convocados previamente, e incluso con la ciudadanía en general a través de intervenciones en el espacio público en Cúcuta y Manizales. Los resultados han sido presentados además en eventos climáticos para personas y organizaciones interesadas en el tema.
Con estas propuestas se ha generado un espacio de encuentro entre el sector ambiental y cultural, al apoyar la producción de contenidos que no solo vuelven tangible y cercano el cambio climático, sino que desarrollan lenguajes y símbolos que llegan a una audiencia amplia. Las propuestas, por tanto, son soluciones creativas a uno de los mayores retos que tenemos hoy en día y muestran cómo acciones simples y cotidianas son parte de la respuesta.
A continuación, presentamos un breve resumen de los proyectos ejecutados:
– El efímero bosque del recuerdo, Grecia Quintero, Cúcuta. Talleres con niños y niñas sobre el clima, bosque seco, el agua y la comida. Los niños realizaron dibujos que fueron animados con la técnica de stop motion y luego proyectados en bloques de hielo construidos con agua lluvia, los cuales fueron ubicados en un separador vial en la ciclovía nocturna.
– ClimaCo, Lucía Caicedo, Bogotá. Diseño, diagramación y animación de diez cómics digitales que comunican desde el humor, la ironía y la acción climática frente a temas como el deshielo de los nevados, el consumo de energía, las emisiones de GEI asociadas a la deforestación y ganadería, entre otros. Uno de los cómics incluye finales sobre “el futuro que soñamos”, realizados por niños y niñas que participaron en un taller de ilustración y cómic, llevado a cabo en el Jardín Botánico de Bogotá.
– Sinfonía reciclada, paz con la naturaleza, Andrea Defrancisco, Choachí. Talleres de creación de instrumentos musicales con materiales de desecho, y de composición musical con niños, niñas y adolescentes del colegio Benposta, quienes escribieron una canción que habla de sus sentimientos y acciones frente al cambio climático.
– Climasters, el desafío del clima, Diana Aguirre, Bogotá. Tres estaciones climáticas con información técnica sobre el cambio climático y algunas soluciones, en las cuales se usaron infografías y sensoramas para motivar conexiones físicas. Se instalaron en tres bibliotecas públicas con previa capacitación de los guías y pedagogos para orientar la visita de los estudiantes y público general.
– Cantoverde, música infantil colombiana para sembrar acciones frente al cambio climático, Andrés Villamil, Bogotá. Colección de diez canciones originales en música y letra sobre cambio climático, nueve de las cuales corresponden a cada uno de los nodos regionales de cambio climático. Para la composición de una de las canciones se realizó un taller con niños y niñas del colegio ambiental de FundaReserva en Barichara, Santander. Se realizó un concierto en el Museo Nacional de Colombia y un taller para maestros de música en la Universidad Pedagógica de Tunja.
– La maleta de Álec: Del fuego cavernícola a las energías renovables, Asociación de Amigos del Instituto Caro y Cuervo, Bogotá. Talleres con niños y niñas de colegios de la localidad La Candelaria, sobre la energía, que incluían conversatorios, revisión de libros académicos y visita guiada a una instalación realizada con el proyecto. A partir de los comentarios de los niños, se propusieron contenidos ambientales para La maleta de Álec (Atlas etnográfico y lexicográfico de Colombia).
– #ElClimaEstáLoco, Transforma, Bogotá. Diseño, creación e ilustración de cómics sobre cambio climático, sus consecuencias y soluciones prácticas y cotidianas, que serán publicados en plataformas físicas y digitales. Están dirigidos a jóvenes y adultos de áreas urbanas. Aún se encuentra en realización.
– Alegorías del buen oficio: Arte doméstico, Paula Ravagly, Manizales. Talleres con una sicóloga y una artista para representar gráficamente, mediante alegorías, los pactos por el ambiente y las motivaciones. Con estas representaciones se intervinieron canecas y contenedores de basura ubicados en una de las principales vías de la ciudad. El resultado del trabajo fue expuesto en la Alianza Francesa de Manizales.
– Cambio: procesos de transformación y El aire es perjudicial para la salud, Melissa Pareja, Bogotá. En una residencia artística, como parte de la Escuela FLORA, la artista desarrolló un proceso de investigación-exploración-creación, centrado en tres ejes de la relación entre el ser humano y el cambio climático: el aire por la contaminación y las emisiones de gases de efecto invernadero; el agua por su oferta como base para la vida, pero también como receptor de los residuos, y la semántica del cambio climático para explorar el contenido y peso que tienen estas palabras, desde que se usan, cómo se usan, quién las usa.
– Forestaciones, FLORA ars+natura, Bogotá. Programa pedagógico y de reforestación urbana, que consistió en un trabajo comunitario de formación a los vecinos interesados en adoptar un árbol a través de talleres teórico/prácticos en técnicas de plantado, permacultura y manutención de jardines en el barrio San Felipe.